domingo, 17 de junio de 2018

OSCURIDAD


Todo estaba oscuro. No podía ver nada delante de mí, incluso no sabía que podría tener delante de mí. Saber que estas cosas andan sueltas por donde estoy yo ahora mismo, me da que pensar en todo lo malo que me puede pasar. Ahora mismo estoy encerrado en un edificio de unas cuantas plantas de alto, no sé bien cuantas hay. ¡pueden ser unas diez plantas! Incluso algunas más.
Cómo iba caminando por la planta a oscuras, no podía distinguir que tenía delante mía. Podía ser de todo, como he dicho antes, no sé qué me puedo encontrar por esta planta, lo único que quiero es salir de este lugar que estoy a oscuras y ver a que me enfrento.
Al pasar unos cuantos minutos, empiezo a escuchar alguna voz femenina, me parece que es una voz de una niña. Empecé a ver por dónde venía esa voz y seguí escuchándola durante unos minutos. Parecía que estaba en una de las plantas del edificio sin acabar, o en obras, porque había caminado unos minutos.
Una vez que llegue a donde estaba la niña, no podría distinguirla bien porque no podíamos vernos muy bien. Pero empecé a tocarla la cara y el pelo, y vi que tenía aproximadamente unos quince años. La dije si estaba sola en esta planta. Ella me dijo que sí, sus padres habían muerto por protegerla de esas cosas que parecían bichos. Al escuchar la palabra bicho la dije:
_ ¿Estas seguras que son bichos? - Dije muy seguro de lo que había escuchado.

_ ¡Así es! Son muy grandes. No soportan la luz. Me dijo ella muy segura de lo que decía.
_ y, ¿Cómo sabes eso de la luz? - Dije.
_ porque mis padres me dejaron en la terraza de mi casa y como era de día, no me hicieron nada.- Me dijo ella.
Una vez que me dijo ella eso, me dio pensar en muchas cosas; pero primero quería saber cómo eran esas cosas primero.
Por otro lado, la dije de donde venía. Ella me dijo que venía de su casa, de su apartamento que estaba unas plantas más arriba. Sin pensármelo dos veces, la cogí de la mano y la dije que íbamos a subir para arriba. Ella me empezó a detenerse, como no queriendo ir, en ese momento la dije:
_ ¿Por qué no subimos, quiero saber a qué me enfrento? - Dije.
_ ¡Porque esas cosas están ahí arriba! Lo mejor es bajar abajo para poder salir de aquí y esperar a que sea de día otra vez. - Dijo la chica.
Por un lado, la niña tenía razón. No podíamos subir allí arriba porque estas cosas están arriba, solo teníamos que salir de este edificio porque no podíamos ver nada. Las luces estaban rotas. No teníamos móviles ni nada para poder llamar… solo la única manera era salir de este edificio como sea y esperar a que sea de día.
Como íbamos bajando las escaleras del edificio, veía poco a poco y a través de los cristales del edifico se veía la calle que estaban a pagadas las luces toda la manzana y incluso algo más… la única cosa que podemos hacer es esperar a que sea de día para ver qué pasa.

Como estábamos bajando a la siguiente planta, vimos a unos hombres que estaban escondidos detrás de unos muebles que estaban tirados por toda la planta. Uno de ellos me llamo la atención, tenía una mordedura de esas cosas en la mano. Sabía que era una mordedura de esas cosas, porque la mano se la estaba poniendo negra. Se la tenían que imputar ya antes que sea demasiado tarde. También, el hombre no tenía buena cara. El amigo estaba con la mano con un hacha para poder cortárselo, pero él no quería todavía. Termia fe que podía curarse la mano. Como estaba viendo, se le estaba extendiendo para todo el brazo entero.
Por otro parte, le dije que si sabían cómo eran esas cosas… el que tenía el brazo mal, me dijo:
_ ¿De verdad quieres saber cómo son esas cosas? - Dijo con un tono poco amable…
_ ¡La verdad sí! ¡Tengo curiosidad de cómo son! - Les dije a los dos…
_ ¡está bien! Sube unas plantas más arriba y mira a ver si son pacíficos. Y cuando hables con ellos, me lo dices. - Dijo uno de ellos.
_ ¿Podemos hacer un fuego quemando la parte de arriba nada más? - Dijo la niña.
_ ¡no estaría anda mal! - Dijo el compañero que tenía el brazo mal.
_ ¿Conatos son? ¿Sabemos acaso cuantos hay? - Dije a todos…
_ ¡La verdad no! Dijo el hombre del brazo mal.
_ ¡No! Pero lo que sí sé cuándo mataron a mis padres, eran dos… -  Dijo la niña.
_ ¡Y dos que hay abajo a unas plantas más abajo! Dijo el amigo que tenía el brazo mal. 
_ ¡Estamos rodeaos de esas cosas! - Dije sin rodeos… Yo creo que la mejor manera es lo que ha dicho la niña, hacer un fuego para que venga la policía y nos salve…
_ ¿Y a que estamos esperando? ¿Vamos? - Dijo el hombre del brazo mal.
Empecemos a ver que podíamos usar para provocar el fuego. Empecemos a ver algunos muebles de unas habitaciones de al lado y lo empecemos a sacarlo fuera. También decidí hacer el fuego unas plantas más arriba para saber cómo iba avanzando el fuego.
Una vez que subimos arriba el hombre y yo, empecemos a encender el apartamento de arriba y las escaleras que subían a la planta de arriba y cómo íbamos bajando nosotros también. Aquello se notaba el calor ya, empecemos a abrir las puertas de los apartamentos y las ventanas para que el humo se notaba que se estaba ardiendo el edificio y la gente lo viera.
Una vez que empecemos a encender todo el edificio y nosotros en el medio de los dos fuegos, aquello era un caos. Menos mal, que deje la planta que tenía encima mía la deje sin arder y una de abajo también; así para tener algo más de oxígeno, sino, aquí nos quemábamos vivos y durábamos un asalto.

Aquí las horas iban pasando y no venía nadie. Ya quedaba menos para amanecer.
Por otro lado, si el fuego no los mataba, teníamos que salir ahí fuera para hacerles frente y sacarlos a la luz y matarlos cueste lo que nos cuente.
Pensando, lo que no daba crédito era porque la policía no venía aquí a salvarnos y matando a esas cosas… ¿O la policía estaba al tanto de nosotros? La verdad es que no lo sé, pero ahora mismo no tenía a nadie a quien debatir este asunto.
Ya estaba viendo como estaba amaneciendo, y el fuego no se había apagado aun, salía bastante llama por la ventana, porque me asome y mirando arriba y veía toda la llama como salía por la ventana. Así por la parte de abajo nuestra.
El calor ya estaba llegando a donde estábamos nosotros instalados, era un calor insoportable, teníamos las ventanas abiertas y por ahí más o menos respirábamos algo mejor que por las escaleras. También, escuchábamos a esas cosas, se parece que se están quemando.
Por otro lado, veo a la niña y a los otros dos hombres con la cabeza sacada por la ventana para poder respirar mejor. La verdad, no se puede respirar muy bien. También veo por la ventana que está amaneciendo ya, pero no veo a nadie abajo como para ayudarnos.
Sobre las siete de la mañana veo que empiezan a pasar gente por debajo nuestra. Empezamos a vocear; pero nada, no tenemos fuerzas para vocear. Así que, para que nos vea empezamos a tirar por la ventana cosas desde arriba. Una vez que se dan cuenta la pareja que pasa por debajo nuestra, vemos que echan las manos a la cabeza por lo que estaban viendo. Veo que rápido empiezan a llamar por teléfono….
_ ¡Rápido un bolígrafo para decirles que no pasen al edificio por los bichos que hay! ¡Rápido! ¿Nadie tiene? - Dije muy nervioso.

En ese momento, aparece la niña con un cuaderno y un bolígrafo.

_ ¡Toma! - Dijo la niña.
_ ¡Gracias!

En ese momento, escribí: ¡No pasen dentro del edificio! Hay unos bichos que os pueden matar. Pone esto en cuarentena y llamar a alguien especializado en estas cosas.
Arranque la hoja y le hice señas al hombre que había abajo y le tire la nota para que se la diera a un policía.
Al cabo de unos cuantos minutos, veo por la ventana que empiezan a venir los coches de la policía. Al ver todos con nuestros ojos la ayuda, nos empecemos a reír sin conocernos de nada.
Por otro lado, gire la cabeza a mi izquierda y veo a la niña llorando.

_ ¿Qué te pasa? - Dije preocupándome de ella. Ahora vienes a ayudarnos. - Dije entre risas…
_ ¡Lloro por mis padres que han muerto arriba! Ahora ano tengo a nadie en esta ciudad. Mis tíos son de Washington D.C. -Dijo la niña llorando.
_ ¡No te preocupes! Ahora la policía se pondrá en contacto con tu familia; pero ahora, no te sueltes de mi mano y cuando vengan la policía a salvarnos, salimos corriendo de aquí, ¿Qué te parece? - Dije a la niña.
_ ¡Bien! ¡Sí!

Al cabo de unos minutos vemos que empiezan a venir más coches de la policía y algún cuerpo de la policía especial. Veo que el hombre le da la nota al policía. El policía empieza a leerla y mira arriba a donde estamos nosotros y se va a uno de los furgones que hay de la policía. A los minutos, vemos que sale otro policía y empieza a mirar arriba también a donde estamos nosotros y agacha la cabeza y mira la nota que escribí otra vez.
En ese momento, no teníamos móviles sin nada para podernos comunicar… lo habíamos dejado cada uno en nuestras casas. La única forma de comunicarnos era que nos diera un walkie talkie o que uno de los policías subiera por las escaleras que estaban ardiendo.
Al cabo de unos cuantos minutos que estábamos asomados por las ventas, escuchamos voces por las escaleras que subían a rescatarnos el cuerpo de policía.
Una vez que vimos a los bomberos y unos policías con mascarillas para poder respirar, en nuestra planta, empecemos hablar.

_ ¿Dónde están esos bichos que decís? - Dijo unos de los policías…
_ Dos pisos más arriba le dije tapándome la boca. - ¿Me podéis dar una mascarilla para la niña? - Dije al policía.

Uno de los policías se quitó su mascarilla y se la puso a la niña para que saliera del edificio. Mientras que los policías subían a ver si esas cosas estaban con vida.
Como subían los policías a ver esas cosas, nosotros nos bajemos con los bomberos para que saliéramos del edificio que estaba en llamas.
Una vez ya fuera, no sabía que pasaba dentro del edificio, solo podía saber lo que escuchaba a algunos policías hablar entre ellos; pero la cosa tenia buena pinta. Escuche que esas cosas estaban muertas, que se habían quemado, que ahora vendría un equipo especializado en estas cosas para examinar a esas cosas y ver que no portaban ningún virus malo.

Por otro lado, ahora nosotros nos van a examinar unos científicos a ver si hemos aportado un virus o alguna otra cosa. Mientras el hombre que le mordieron, no sé si van a poder salvarle el brazo porque lo tienen muy mal, así que, yo creo que se lo van a cortar para poder examinar los científicos con el ADN que aporto en el brazo del hombre.




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